Ante la negatividad prosigo a la meta (3ª parte)

El gigante de la negatividad se levanta en nuestras vidas de forma poco evidente y va haciéndose parte de nuestra vida hasta convertirse en una forma de vida en la que todo lo pasamos por el filtro de lo malo, surgen sentimientos como la queja, la insatisfacción, la crítica, la tristeza, la frustración, porque nos sentimos devastados al ver que nada está bien.

Desde el principio un ejemplo claro de ver las cosas negativamente sucedió en el huerto del Edén, cuando Eva se pone hablar con la serpiente y esta le dice Génesis 3:1-3 “¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto? Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer;pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis” El enemigo siempre va a venir a nuestra mente a lanzarnos el primer pensamiento o idea negativa y busca que centremos nuestra mirada no en todo lo que sí podemos tener y disfrutar, sino que la centremos en aquello que no tenemos o no hemos podido lograr.

El gigante de la negatividad no hizo la excepción con Jesús, quien fue cien por ciento hombre en este mundo y enfrentó muchos momento la negatividad en palabras y en actos por parte de muchas personas, sin embargo, nada impidió que él cumpliera el propósito y plan de salvación para lo que el padre le había enviado.

HOy vamos a recordar algunos momentos en la vida de Jesús que nos enseña cómo él nos comprende porque siendo hombre pasó por situaciones parecidas a las que nosotros podemos enfrentar, Jesus nos entiende en esos momentos en los que el gigante de la negatividad quiere venir para que nos sintamos mal y sin esperanza, sin embargo, Jesús ha vencido sobre toda negatividad y nos ha dado la victoria.

LA NEGATIVIDAD DE NATANAEL: En el libro de Juan 1:45-46 dice “Felipe halló a Natanael, y le dijo: Hemos hallado a aquel de quien escribió Moisés en la ley, así como los profetas: a Jesús, el hijo de José, de Nazaret. Natanael le dijo: ¿De Nazaret puede salir algo bueno? Le dijo Felipe: Ven y ve. Nazaret era una pequeña aldea, no era considerada un lugar prestigioso. Sin embargo, Jesús, nació y creció allí.
Y cuando Natanael se encontró con Jesús, su negatividad se transformó en asombro. Jesús lo conocía profundamente y le dice “Antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.” Para Jesús su origen humilde no lo limitó;ni las palabras dichas por Natanael, él superó ese momento en su vida con amor, sabiduría y poder.

Cuántas veces se levanta el gigante de lo negativo a través de personas que menosprecian nuestro origen, menosprecian nuestra familia o quienes somos, Jesús nos enseña a enfrentar este gigante con sabiduría, sin peleas, sin defensa o enfado, sencillamente con amor, hablando sabiamente, Jesús sabía quién era y nosotros podemos enfrentar estas situaciones negativas, leyendo la palabra, estando seguros quién ha dicho el Señor que somos, así cuando vengan las palabras de rechazo, menosprecio, palabras negativas de nosotros sabremos cómo enfrentarlas y nunca creerlas, porque sabemos que somos quién Dios dice que somos, esa es la única opinión que cuenta.

LA NEGATIVIDAD DE LOS FARISEOS: En Mateo 9:10-13 Jesús compartió una comida con recaudadores de impuestos y pecadores. Rápidamente no se hicieron esperar las críticas y comentarios, juzgando a Jesús por compartir la mesa con personas que no eran consideradas en alta estima, a lo que Jesús al oirlos les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Id, pues, y aprended lo que significa: Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento.”

El gigante de la negatividad también se levanta el qué dirán de otros, quienes nos juzgan con dureza, Jesús enfrentó esas actitudes y palabras negativas, cómo alguien como él podía compartir su mesa con gente tan despreciable, cuántas palabras y pensamientos negativos habían en contra de Jesús por compartir su mesa con pecadores, sin embargo Jesús sabía y conocía perfectamente el plan por el cual había sido enviado, él sabía que los sanos no tienen necesidad de medicina, su propósito era llamar a los pecadores al arrepentimiento.

Cuánto nos afecta la actitud negativa de otros cuando nos juzgan y señalan, nos importa mucho el qué dirán y esa negatividad nos llena de inseguridad y de temores si no sabemos quiénes somos en el Señor y a lo que Dios nos ha enviado. Jesús venció también el gigante de la negatividad a través de las críticas y juicios de otros con misericordia por los pecadores y con amor.

SU CRUCIFIXIÓN Y MUERTE: El camino, la crucifixión y la muerte de Jesús fueron momentos dolorosos y llenos de negatividad donde este gigante se levantó como nunca antes.
Podemos estar seguros que nadie ha vivido un momento en la vida tan negativo como Jesús.

De camino al Calvario Jesús cargó su propia cruz. Considerado como un hombre despreciable le ponen en medio de dos ladrones. Luego Pilato ordenó que se colocara un letrero sobre la cruz que decía: “Jesús de Nazaret, Rey de los Judíos”, que sirvió para que otros se burlaran de él.
Agregado a esto los soldados tomaron su manto y lo partieron en cuatro partes, y echaron suertes por su túnica.

Los momentos más negativos en toda la historia Jesús los enfrentó por amor a cada uno de nosotros, y nos da un ejemplo maravilloso de amor, valentía y compasión en sus palabras, diciendo “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”: Jesús oró por sus verdugos y perdonó a aquellos que lo crucificaban. Y al final, Jesus declara que su obra redentora estaba completa diciendo “Consumado es”.

Nada ni nadie hizo bajar a Jesús de la cruz, ni palabras ofensivas, ni palabras o actitudes negativas, nada le hizo desistir de su plan de redención. Esto nos lleva al mayor ejemplo de victoria sobre el gigante de la negatividad, Jesús le ha vencido y en esa victoria, nos ha dado la victoria a nosotros como sus hijos.

Así que en este camino hacia la meta también vamos a enfrentar el gigante de la negatividad, seamos sabios usemos el filtro del agradecimiento, del amor y sobre todo como dice la palabra en Hebreos 12:3 “Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar.” Consideremos la vida de Jesús, nadie ha vivido momentos negativos tan extremos como Él, y ese poder está nosotros para poder vencerlo.

No dejemos que el gigante de la negatividad nos destruya, tenemos la victoria en Cristo Jesús, luchemos, batallemos contra este gigante con oración, palabra de Dios, agradecimiento y en el nombre de Jesús, prosigamos hacia la meta.