Casi catastrófico
Escrito por Daniel Valuja el 18 de abril de 2024
El 28 de febrero de 2024, la NASA estuvo al borde de una posible catástrofe cuando un satélite ruso a la deriva se acercó peligrosamente a uno estadounidense. Pam Melroy, administradora adjunta de la NASA, expresó que el choque habría generado una nube de partículas hipersónicas, amenazando a los astronautas y la infraestructura espacial con el síndrome de Kessler, una reacción en cadena que podría inutilizar toda la infraestructura espacial global. Aunque el choque fue evitado, el evento sirvió como advertencia sobre la urgencia de limpiar el espacio y controlar los satélites.
El satélite ruso, Cosmos 2221, estuvo a punto de colisionar con el satélite TIMED de la NASA, esencial para el monitoreo de la atmósfera terrestre. La cercanía fue tan extrema que la distancia entre ambos fue menor a 10 metros. Este incidente subraya los riesgos de los desechos espaciales y la vulnerabilidad del entorno orbital. La densidad de satélites en órbita terrestre baja ha aumentado exponencialmente, lo que incrementa la probabilidad de que la teoría de Kessler se materialice.
La NASA y otras agencias espaciales reconocen la necesidad de abordar este problema. La Estrategia de Sostenibilidad Espacial de la NASA busca mejorar el seguimiento y la gestión de satélites y escombros orbitales, así como desarrollar tecnologías para evadir colisiones. La ESA también trabaja en limpiar los satélites muertos, y empresas como Airbus, Astroscale y ClearSpace desarrollan tecnologías para eliminar los desechos espaciales.
Sin embargo, es urgente tomar medidas concretas. Primero, controlar la proliferación de redes de internet espaciales comerciales, como Starlink de SpaceX, que planea lanzar 42.000 satélites. Segundo, implementar sistemas en futuros satélites para maniobras, recarga de combustible y retirada de órbita, lo que ayudaría a mantener el orden en el espacio.
Si no se actúa pronto, la órbita terrestre baja podría saturarse, poniendo en riesgo la viabilidad de la exploración espacial y los servicios terrestres fundamentales.
- Fuente Noticia: El Confidencial.