Defensas bajas: síntomas, causas y consejos para subirlas
Escrito por Jessica Juez el 26 de febrero de 2024
Para entender qué significa tener un sistema inmunitario débil en defensas, primero hay que tener claro qué es y cómo funciona nuestro sistema inmune.
El sistema inmunitario defiende al organismo de sustancias consideradas tóxicas y extrañas, como bacterias y virus o elementos químicos, también conocidas como antígenos. Cuando detecta uno de estos posibles peligros, el organismo activa una respuesta inmune, es decir, ataca.
Para combatir el “intruso”, los glóbulos blancos (células que forman el sistema inmune) producen anticuerpos. Si se vuelve a detectar el mismo antígeno, nuestro sistema inmunológico será capaz de reconocerlo y activar con más rapidez su respuesta para prevenir daños.
Esta función del sistema nos permite evitar determinadas enfermedades. A esta capacidad también se la conoce con el término inmunidad.
Cuando tenemos las defensas bajas, las posibilidades de ponernos enfermos o de contraer infecciones aumentan debido a que un sistema inmunitario débil no es capaz de combatir los antígenos de forma adecuada.
¿Cómo sé si tengo bajas las defensas?
Como no se pueden detectar las defensas bajas con una analítica, lo ideal es mantener bajo control nuestra salud, analizando cómo nos sentimos y prestando atención a algunos síntomas de bajada de defensas. De este modo, sabremos si nuestro sistema inmune está funcionando de manera correcta.
Es de vital importancia analizarnos, ya que los síntomas de unas defensas del cuerpo bajas pueden ser muy leves, y pasar desapercibidos por mucho tiempo. En otros casos es más evidente que tenemos el sistema inmunitario débil, por ejemplo con infecciones que se repiten a menudo.
Un sistema inmune que funciona bien es clave para prevenir infecciones de distintos tipos y orígenes, por lo que ante la sospecha de tener unas defensas bajas, lo ideal es acudir a un profesional de la salud y seguir las pautas que nos ayudan a subirlas.
Teniendo en cuenta que es peligroso tener las defensas bajas, también es importante conocer las causas que nos pueden llevar a esta situación.
¿Cuáles son las causas de las defensas bajas?
Cuando más se habla de sistema inmunológico débil suele ser en otoño y en primavera. De hecho, durante estas estaciones hay un mayor número de personas que se sienten más débiles y notan que se enferman más a menudo o les falta energía.
Lo cierto es que los cambios en las temperaturas y en las horas de luz, entre otras cosas, pueden modificar nuestra rutina y hábitos diarios afectando a nuestro equilibrio interno, contribuyendo a tener las defensas bajas.
No obstante, un desequilibrio que debilite el sistema inmunológico se puede dar en cualquier momento del año, y por razones muy diversas.
Déficit de nutrientes
Una dieta poco equilibrada, en la que se consume comida chatarra con frecuencia y es pobre en nutrientes esenciales, puede producir un sistema inmune débil y aumentar la cantidad de toxinas en el organismo, afectando a su funcionamiento y con consecuencias para la salud.
Enfermedades
Ciertas enfermedades como la anemia o el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) afectan al funcionamiento del sistema inmune. También hay enfermedades que bajan las defensas debido a déficit nutricionales relacionados con la mala absorción de nutrientes, alergias o intolerancias, como ocurre en personas que padecen celiaquía.
Modificaciones del ambiente
Como comentábamos, la primavera y el otoño se caracterizan por cambios que pueden causar defensas bajas. Pero, en general, todas las alteraciones externas tienen efectos en nuestro organismo. Por ejemplo, un uso inadecuado del aire acondicionado produce cambios de temperatura y humedad que pueden influir en el buen funcionamiento del sistema inmunitario, bajando las defensas y exponiéndonos más a los ataques de virus, bacterias y otros antígenos.
Dormir mal
Cuando dormimos, nuestro sistema inmunitario trabaja para producir sustancias que atenúan y previenen diversos problemas de salud como infecciones. Por ello, tanto la cantidad como la calidad del sueño son fundamentales para las defensas. Si no dormimos el tiempo suficiente o dormimos mal, aumenta el riesgo de caer enfermos ante ataques de virus, bacterias, etc.
Problemas emocionales
Pasar por episodios de estrés, ansiedad, depresión y otras alteraciones de la salud mental tiene un efecto sobre el sistema inmune y aparecen los síntomas de una bajada de defensas. Esto se debe a que aumenta la producción de glucocorticoides, que afectan a los elementos responsables de proteger el organismo.
Uso de antibióticos
El antibiótico baja las defensas al afectar a la flora bacteriana y reducir la eficacia de los neutrófilos, un tipo de células del sistema inmunitario que combate infecciones. Por ello, es muy importante tomar medicamentos solo bajo prescripción médica y seguir las pautas que indica el profesional en cuanto a dosis, duración del tratamiento, etc.
9 síntomas para detectar las defensas bajas
El portal Penn Medicine, respaldado por la Universidad de Pensilvania, habla de al menos 6 signos que ayudan a cómo saber si tengo las defensas bajas. Hemos ampliado el listado hasta recoger 9 síntomas de una bajada de defensas:
- Niveles elevados de estrés: todos, en algún momento de nuestra vida, hemos caído enfermos después de darlo todo para un proyecto importante en el trabajo o en un examen. Esta reacción es consecuencia de haber sufrido unos niveles altos de estrés, que reducen la producción de glóbulos blancos, exponiéndonos a más ataques de antígenos.
- Tener gripes muy a menudo: pasar de un resfriado a otro de forma continua o no lograr recuperarse de una gripe también es un síntoma de defensas bajas.
- Sufrir problemas digestivos continuos: una parte importante del sistema inmunitario está en el aparato digestivo. De hecho, la flora intestinal también actúa como defensa. Si sufres de problemas estomacales de forma habitual, puede ser un aviso de que tu sistema inmune no está funcionando de la manera correcta.
- Cicatrización lenta: si te cortas o sufres una quemadura, las células del sistema inmunitario se ponen en marcha de inmediato para regenerar los tejidos. En caso de que tus heridas tarden en sanar, puede ser un síntoma de que las defensas del cuerpo están debilitadas.
- Infecciones recurrentes: padecer más de cuatro infecciones, en especial si son infecciones respiratorias, o necesitar más de dos ciclos de antibiótico al año, se considera un indicador de que tu sistema inmunológico está débil.
- Sensación continua de cansancio: aunque es normal sentirse cansados en determinadas situaciones. Pero si esa sensación persiste por más de un mes, incluso a pesar de descansar bien, puede estar relacionado con unas defensas bajas.
- Caída del cabello: aunque hay otras causas que la pueden producir, que se caiga el pelo también puede ser uno de los síntomas de que tienes el sistema inmunitario débil.
- Insomnio o problemas para dormir: además de indicar que puedes tener las defensas bajas, aumenta los problemas porque produce cansancio y debilita más el sistema inmunitario, lo cual genera un peligroso círculo.
- Alergias: aunque el sistema inmune no protege frente a las alergias, cuando los síntomas de estas empeoran o se produce un mayor número de episodios, puede ser debido a que tienes bajas las defensas.
Es muy importante prestar atención a estos síntomas y confirmar si se trata de un sistema inmune debilitado porque es peligroso tener las defensas bajas.
Consecuencias de tener las defensas bajas
El principal objetivo de nuestro sistema inmunológico es el de defendernos de agresiones de sustancias tóxicas y dañinas, y si tenemos las defensas bajas por alguna razón, serán menos eficientes y aumentarán las posibilidades de sufrir alguna enfermedad debido a los antígenos. Algunos de estos problemas son infecciones de la piel y enfermedades respiratorias como bronquitis o neumonía.
Además, en el caso de los niños es aún más peligroso tener las defensas bajas porque no solo influye en su estado de salud con las consecuencias que aquejan a los adultos, sino que también puede producir retrasos en el desarrollo normal de su organismo.
- Fuente Noticia: FIATC.es