Tres armas para vencer
1) La Palabra de Dios: Recíbela a través de la predicación, la enseñanza, la lectura y el estudio personal de la Biblia. Continúa en la Palabra hasta que se convierta en revelación dada por inspiración del Espíritu Santo.
2) Alabanza: Esto derrota al diablo más rápido y de manera más eficiente que cualquier otro plan de batalla, pero debe ser una genuina alabanza que salga del corazón, no solo de labios para afuera o como ritual religioso.
3) Oración: La oración es una relación con Dios, comunicándote con Él, pidiéndole ayuda o hablando con Él sobre lo que sea que esté en tu corazón. También incluye estar tranquilo en la presencia de Dios, escucharlo hablarte a tu corazón. Para tener una vida de oración efectiva, debemos desarrollar una relación íntima y personal con el Padre. Reconoce que Él te ama y que quiere ayudarte.
Hay una guerra en curso, pero Dios está luchando de tu lado y te ha dado las armas que necesitas. ¡Úselas para echar a Satanás corriendo!
Espacio del devocional de amigos con la participación de Dorys Uvan.