Salmos: Capítulo 65 – Bienaventurado
Escrito por Amigos en Radio Solidaria el 12 de junio de 2024
El Salmo 65 es un himno de alabanza y gratitud a Dios por su provisión, tanto espiritual como material. Comienza con la expectativa de adoración y el reconocimiento de que Dios escucha y perdona.
Luego, se enfoca en las maravillas de Dios en la creación, desde la calma de las tormentas hasta la formación de los montes. Finalmente, celebra la abundancia y fertilidad que Dios otorga a la tierra, mostrando cómo Él cuida de toda su creación y provee en abundancia.
1. Introducción y Alabanza a Dios
- Alabanza en Sion: «A ti, oh Dios, se espera en Sion, y a ti se pagarán los votos.»
2-4. Gratitud por la Escucha de Dios
- Dios escucha las oraciones: «Tú oyes la oración; a ti vendrá toda carne.»
- Perdón de los pecados: «Las iniquidades prevalecen contra mí; mas nuestras rebeliones tú las perdonarás.»
- Bendición de estar cerca de Dios: «Bienaventurado el que tú escogieres y atrajeres a ti, para que habite en tus atrios; seremos saciados del bien de tu casa, de tu santo templo.»
5-8. Maravillas y Poder de Dios en la Naturaleza
- Respuesta asombrosa de Dios: «Con tremendas cosas nos responderás tú en justicia, oh Dios de nuestra salvación, esperanza de todos los términos de la tierra y de los más remotos confines del mar.»
- Creador de los montes: «Tú, el que afirma los montes con su poder, ceñido de valentía.»
- Calma las tormentas: «El que sosiega el estruendo de los mares, el estruendo de sus ondas, y el alboroto de las naciones.»
- Asombro de la tierra: «Por tanto, los habitantes de los fines de la tierra temen de tus maravillas; tú haces alegrar las salidas de la mañana y de la tarde.»
9-13. Bendición de la Tierra
- Riega y fertiliza la tierra: «Visitas la tierra, y la riegas; en gran manera la enriqueces; con el río de Dios, lleno de aguas, preparas el grano de ellos, cuando así la dispones.»
- Riega los surcos: «Haces que se empapen sus surcos, haces descender sus canales; la ablandas con lluvias, bendices sus renuevos.»
- Corona el año con sus bienes: «Tú coronas el año con tus bienes, y tus nubes destilan grosura.»
- Abundancia en el desierto: «Destilan sobre los pastizales del desierto, y los collados se ciñen de alegría.»
- Campos y valles llenos de vida: «Se visten de manadas los llanos, y los valles se cubren de grano; dan voces de júbilo, y aun cantan.»