Unidos en la misión

En tiempos de secularización y confusión, la iglesia necesita recuperar su integridad y el deseo de proclamar el evangelio con valentía. Estos fueron los principales mensajes escuchados en la conferencia del Foro Europeo de Liderazgo (ELF) 2023, en Wisla (Polonia) entre el 18 y el 24 de mayo.

“Una gran necesidad de la iglesia en este momento es la integridad del evangelio”, dijo el teólogo Michael Reeves (Inglaterra) a los 750 participantes en la primera noche de este encuentro anual. “Las carencias morales y la sequía espiritual que muchos cristianos lamentamos, tienen raíces”, dijo. “Nos asombramos cuando los líderes evangélicos fallan”, pero esto es una señal de que “minimizamos el pecado y practicamos un arrepentimiento superficial”.

En un mensaje que marcó la pauta para el resto de la semana, Reeves advirtió contra “priorizar el desempeño externo por encimar de la realidad interna de la persona”. “Amigos”, continuó, “nuestra necesidad no es solo de integridad moral sino de una integridad en el evangelio. No hay salud espiritual sin reconocer que cada uno de nosotros necesita la misericordia de Dios”.

El tema ya había sido puesto sobre la mesa por Dave Patty (República Checa) en un seminario previo a la conferencia en el que llamó a los líderes cristianos a identificar “ídolos ocultos” que les impiden confiar plenamente en Dios. Además, el analista cultural Andrew Fellows (Inglaterra) abordó los fracasos y escándalos en iglesias y organizaciones en su seminario “Trayendo a Jesús de regreso a la iglesia”.

La semana en la hermosa ciudad de Wisla (una de las pocas áreas históricamente protestantes de Polonia) estuvo repleta de contenido desde pronto por las mañanas hasta las noches. Una mayor presencia este año de líderes jóvenes, la mayoría provenientes de Europa Central y del Este, contribuyó a una atmósfera festiva. Muchos comentaron los animados momentos de adoración y las oportunidades de escuchar y orar por cristianos de venidos de países como Ucrania y Bielorrusia.

Malaquías para los cristianos europeos

Conrad Mbewe (Zambia) expuso el libro de Malaquías en las sesiones plenarias de la mañana. Bajo el tema “El Dios que está ahí”, el pastor bautista hizo un amable pero potente llamado de atención a los cristianos en Europa que se sientan “tentados a pensar que no vale la pena servir a Dios”. Mbewe llamó a recuperar una visión clara de la gloria de Dios y a no renunciar a la “fidelidad pastoral y personal”.

“La iglesia cristiana no es un club, es la iglesia del Dios vivo”, dijo el pastor zambiano. “Él busca la honestidad y la integridad. En lugar de convertirnos en fariseos del siglo XXI, vayamos a Jesús, su sangre cubrirá nuestro pecado y encontraremos en él la fuerza para enseñar la Palabra con coherencia”. El sufrimiento y el cansancio personal, dijo, deben ser llevados a Dios. “El evangelio no avanzará con un compromiso a medias”.

Mbewe llamó a vislumbrar la justicia y consuelo presentados en el último capítulo de Malaquías: “Cuando llegue el día del Señor, veremos que todo el esfuerzo tuvo sentido”, concluyó.

Recuperar la predicación pública

Tres evangelistas hablaron en las plenarias vespertinas. Julia Garschagen (Alemania) analizó los valores de la Generación Z y llamó a escuchar a los más jóvenes de Europa con “humildad y valentía”. Esto es necesario para responder a un “cambio en los últimos 10 años” por el que “en nuestra cultura, las Buenas Nuevas de Jesús se han pasado a ver como malas noticias”.

Las iglesias necesitan acercarse nuevamente a no creyentes y escépticos para mostrar que el evangelio es “emocionalmente satisfactorio, intelectualmente inspirador y moralmente bueno”, agregó.

También Luke Greenwood (Polonia) llamó a “ir tras los perdidos” de la cultura juvenil secularizada de Europa, “provocando hambre espiritual” con evangelismo intencional. “Hemos hecho las cosas para nuestros jóvenes demasiado cómodas en las iglesias y se aburren, tenemos que sacarlos a la calle”, dijo al compartir sobre encuentros con no creyentes en contextos urbanos. Greenwood pidió un “nuevo movimiento misionero” que sea “audaz” en su acción.

Lindsay Brown (Gales), mentor de jóvenes evangelistas en contextos universitarios, señaló el ejemplo de la Iglesia Primitiva, reflexionando sobre los escritos de los tres primeros siglos del cristianismo. Brown mostró que un compromiso con la evangelización, una ética distintiva, una comunidad fuerte y la disposición a sufrir por el evangelio fueron las características que se observaron en los primeros tres siglos después de Pentecostés.

Redes, seminarios, cenas nacionales…

Todas las mañanas se realizaron sesiones de capacitación y charlas en las 23 redes temáticas de ELF (entre ellas: Política, Ciencia, Medios de comunicación, Plantación de iglesias o Líderes juveniles). El objetivo es conectar líderes evangélicos en áreas de trabajo similares que no se han conocido previamente. Por las tardes, había una gran oferta de seminarios, sobre temas como la inteligencia artificial, la salud mental, la revitalización de la iglesia y la apologética bíblica.

En la noche de la cena nacional, el martes, se ofreció un espacio para que los que venían del mismo país elaboraran estrategias sobre iniciativas de colaboración dentro de sus fronteras.

También el arte tuvo su espacio. Destacó el concertista de piano Reinis Zarins (Letonia), quien interpretó piezas de compositores modernos que abordan temas bíblicos.

• Fuente Noticia: Protestante Digital.