Pornografía: ¡Se puede ser libre!
Escrito por Carlos Matos el 26 de mayo de 2022
Quienes están atados a la pornografía y son dependientes de su consumo no tuvieron siempre esa práctica compulsiva. Se inició como una práctica lenta y progresiva. Luego fue convirtiéndose en una práctica irresistible y luego esclavizante. Si quieres ser libre, Jesús revela la clave:
“Si tu ojo derecho te hace pecar, arráncalo y tíralo; porque te es mejor que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno. Y si tu mano derecha te hace pecar, córtala y tírala; porque te es mejor que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo vaya al infierno” (Mateo 5:29-30).
“Arráncalo y tíralo” y “córtala y tírala” son mandatos hiperbólicos que no se pueden tomar de manera literal. Lo que significan es que esta frase prohíbe darle vía libre al adulterio y a las seducciones engañosas.
¿Qué cosas te facilitan cometer el pecado de pornografía? Ahora que sabes cuáles son, arráncalas o córtalas.
Puede que tengas una amistad dañina; sustitúyela por amistades cristianas. Quizá la Internet junto con tu computadora, tablet o teléfono sean tu plataforma para esa práctica adictiva; mi consejo es que bloquees el acceso a páginas pornográficas. Es probable que tu lugar de trabajo sea el escenario donde pecas. Si ese es el caso, pide a Dios que te provea un nuevo empleo y transforme tu vida; si cambias de lugar de trabajo sin que Cristo transforme tu interior, nada cambiará.
¡Sé radical en la lucha contra la pornografía, porque Dios te da libertad del pecado en Cristo!